REFLEXIÓN CRÍTICA UNIDAD 2 Y PLANTEAMIENTO PROBLEMÁTICA SOCIAL

REFLEXIÓN CRÍTICA UNIDAD 2.

Al realizar revisión de cada contenido bibliográfico de la unidad 2, puedo decir que hoy en día, nosotros los jóvenes estamos en constante aprendizaje, buscando temas innovadores para ejercitar la política social ya que es un tema muy importante para nuestra sociedad, abarca puntos clave para definir la ética, realizando propuestas que facilitan cada paso para la construcción de una mejor forma de vida, con  educación, habilitando espacios de empleo y la protección social de la comunidad.

Todo esto nos conlleva a generar mayores retos para la satisfacción de las necesidades básicas de la población, hacia un cambio en las estructuras sociales a partir del potenciamiento de ciudadanos, sujetos de derechos y deberes, autónomos y al mismo tiempo, solidarios corresponsables en el mejoramiento de las condiciones de la vida colectiva.
Considero que hoy en día los conceptos de educación, trabajo y familia están demasiado olvidados, también el Estado y las formas de relacionamiento entre las juventudes y las políticas públicas.
El problema actual del desarrollo económico y social no se debe por falta de recursos, sino a una escasez de Educación e interés por nuestro entorno, por nuestra nación.
“la utilización creativa de las posibilidades, de los recursos propuestos por las políticas sociales en beneficio de una persona que se sitúa en marcha hacia la autonomía” (De Robertis 2003, 81). 

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMÁTICA SOCIAL

En la ciudad sabanera de la costa de Sincelejo en una de las zonas más excluidas y estigmatizadas del sur de la ciudad. No hay servicios públicos domiciliarios, las calles sin pavimentar y el acceso a salud y educación son precarias y de mala calidad. Los jóvenes no tienen opciones ni oportunidades distintas a vagar o al rebusque, casi siempre al servicio de mafias que los usan para el microtráfico de drogas, el cobro de cuentas, la mensajería, la prostitución y el contrabando.

Los gobiernos locales solo acatan a presionar a la policía y al ejército, para que atropellen a los jóvenes, para que abusen de su poder y de sus armas y capacidad de intimidar y maltratar. En la radio el Alcalde habla de estar movilizando la fuerza pública para garantizar la seguridad. Anuncia multimillonarias inversiones para dotar a la policía de carros y motos, de ubicación de nuevas cámaras de televisión en las calles, de incremento del pie de fuerza de la policía. Solo piensan en represión, en atender las expresiones superficiales de un mal mucho más profundo, cual es la pobreza agravada por el robo de los recursos públicos asignados para atenderla, así como de la degradación ética de la sociedad que está formando jóvenes aptos para el mal, y no para el bien común. A los jóvenes les piden conducta ejemplar, cuando comenzando por sus padres y llegando a los más altos dirigentes públicos y privados de la sociedad colombiana, lo único que reciben a diario es mal ejemplo.